Noche Vieja 2004 | ||||||||||||||||||||||||
Noche Vieja 2004 Corría el 1999 cuando amigotes de Jorcas y del vecino Allepuz decidimos montar una fiesta juntos para celebrar la entrada del año nuevo. Desde entonces cada año uno de los dos pueblos organiza el jolgorio y este año (6ª edición) ha tocado en tierras zoqueras. Y es que ya se ha instaurado como una fiesta obligada. Somos muchos los que acudimos desde las remotas ciudades donde vivimos e incluso desde otros paises (Irlanda, Francia...) e incluso alguno ha hecho escala en Jorcas antes de irse a Escocia :) Queríamos haber hecho el baile en la nueva nave pero resulta que la empresa concesionaria que debía poner el techo está superando los plazos de entrega. Ya están listas todas las paredes y las puertas y además ya está hecha la pequeña nave-almacén adyacente. A ver si no hay más contratiempos y está lista en tres o cuatro meses para poder usarla en las próximas fiestas de San Pedro Mártir de 2005.
Si durante el resto del año nos solemos juntar alrededor de una mesa... ¡Noche Vieja no iba a ser menos! Unos cenamos sendos cochinillos en la tasca, otros catering de Teruel en el ayuntamiento, el caso es que quien se quedó con hambre fue porque quiso.
Tras la comilona acudimos a la replaceta de la iglesia a comernos las uvas. Como también va siendo costumbre, las campanadas no estuvieron del todo acertadas :) Quizás sonó alguna campana de más, así nadie se quedó con alguna uva en la mano, je je.
Y tras las uvas acudimos al trinquete, donde montamos la fiesta. Como no queríamos incrementar el número de catarros conectamos un cañón de aire y tapamos los arcos del trinquete con las lonas que antes se usaban para el escenario. Con todo ello la temperatura en el trinquete era... ¡cojonuda!
¡Fiesta a tope! La agradable temperatura, el eclipse musical, la barra libre de güisqui y sobre todo la gente hicieron que la noche fuera fabulosa.
La última noche del año acabó muy tarde. El sol estaba en la cima cuando alguno aún rondaba por la plaza. La misma tarde del sábado 1 de enero nos juntamos un buen pelotón de guerreros resacosos, armados con escobas y recogedores y limpiamos el desaguisado. Por la noche aún nos volvimos a juntar unos cuantos en la tasca, haciendo un buen corro en torno a la estufa.
Regresamos a nuestras ocupaciones: unos siguen con sus tareas en Jorcas, otros vuelven a sus remotos hogares, pero ya vamos poniendo un ojo en la próxima reunión. ¡Salud!
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