| Diario de las fiestas de San Pedro Mártir 2005 | ||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
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 ¡Festival!     ¡festival! 
 Y llegó la fiesta. Una noche como todas las que allí nos pegamos: ¡genial! Fue la primera fiesta en la nueva nave y como es grande y no somos tantos ... pues parecía que estaba medio vacía, pero aún y así había un buen número de personas. 
 
 Y ¿por qué "la noche de los cinturones"? Apareció un espíritu en el baile, era "el espíritu del agitador de cinturones", inducía a la gente a desabrocharse los cinturones, agitarlos al viento y a sacudir con ellos las barras y a perseguir a las mozas. Una cachonda metáfora. El espíritu primero poseyó a Vidal, se lo pasó a Javi y llegó incluso a Ricardo y a Loris. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 Las nuevas generaciones piden paso, y no veas cómo vienen. Mira qué maravilla, mira, mira: 
 
 
 
 Y este año han habido novedades. Ha aterrizado en el colectivo zoquero una conquense de la mano de Jose el incansable: 
 
 Cada uno se recogió a su hora pero para algunos esa hora llegó algo más tarde. Almuerzo, xarreta, últimos tragos ... y los chistes de Pepe Grao! ¡Y no veas cómo estaba la mistelica de Toni! 
 
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